Cuando se trata del mantenimiento de maquinaria y de equipos industriales, el análisis de aceite es una técnica esencial. Proporciona información detallada sobre el estado del lubricante, permitiendo la toma de decisiones informadas sobre el mantenimiento y los cambios de aceite necesarios. Esto no solo extiende la vida útil de los equipos, sino que también reduce costos operativos y previene paradas inesperadas.
Con un análisis regular del aceite, se puede asegurar un funcionamiento eficiente y continuo de la maquinaria, protegiendo la inversión en equipos y mejorando la confiabilidad de las operaciones. En este artículo, te contamos sobre los parámetros clave para llevar a cabo un análisis de aceite correcto.
En éste, debes tomar en cuenta lo siguiente:
• Viscosidad: Indica la resistencia del aceite a fluir a una determinada temperatura.
• Índice de viscosidad: Mide la variación de la viscosidad del aceite con la temperatura.
• Número de acidez total (T.A.N.): Mide la acidez del aceite. Altos niveles de acidez pueden indicar problemas, como el agotamiento de aditivos y la oxidación del aceite.
Por otro lado, es importante detectar la existencia de alguno de estos elementos contaminantes en el aceite:
• Silicio: Puede indicar la presencia de polvo o tierra en el aceite.
• Porcentaje de humedad: La presencia de agua en el aceite puede causar corrosión y otros problemas.
• Porcentaje de sedimentos: Indica la cantidad de partículas sólidas suspendidas en el aceite.
Los parámetros metalográficos revelan la presencia de metales de desgaste en el aceite, con lo cual se puede demostrar si existe daño excesivo de componentes específicos. Los parámetros comunes incluyen:
Dependiendo de los resultados de los parámetros, podrás tomar decisiones sobre los siguientes pasos. En la siguiente imagen, te compartimos todos los resultados posibles y algunas sugerencias de acciones que puedes ejecutar de acuerdo con tus conclusiones.
Para obtener resultados precisos en el análisis, es fundamental tomar la muestra de aceite de manera adecuada. Aquí te describimos brevemente los pasos y cuidados necesarios:
1. Preparación del equipo: Asegúrate de que el equipo esté operando a temperatura normal y que el aceite esté bien mezclado.
2. Limpieza del punto de muestreo: Limpia la zona alrededor del punto de muestreo para evitar la contaminación de la muestra.
3. Uso de contenedores limpios: Utiliza frascos limpios y secos diseñados específicamente para la toma de muestras de aceite.
4. Extracción de la muestra:
a. Método de grifo de muestreo: si el equipo tiene un grifo de muestreo, ábrelo y deja fluir un poco de aceite antes de recolectar la muestra.
b. Método de bomba de muestreo: utiliza una bomba de muestreo si no hay grifo. Inserta la tubería de la bomba hasta la mitad del nivel de aceite y extrae la muestra.
5. Sellado y etiquetado: Una vez recolectada la muestra, sella el frasco inmediatamente y etiquétalo con la fecha, el tipo de equipo, y cualquier otra información relevante.
6. Transporte al laboratorio: Envía la muestra al laboratorio de análisis lo antes posible, evitando la exposición a temperaturas extremas y luz directa para mantener la integridad de la muestra.
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